Guatemala, un himno a la naturaleza, a la historia y a las tradiciones

Este país de Centroamérica se ha convertido en el centro de atención del turismo que valora conocer la historia y tradiciones del mundo maya, al contar con importantes yacimientos arqueológicos.

Pero también es un excelente destino para deleitarse con paraísos naturales de gran belleza, entre volcanes en actividad, lagos fascinantes y una fauna que enamora.  

Tikal

Declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, el Parque Nacional Tikal es uno de los mayores yacimientos arqueológicos del mundo. Por más de mil años esta imponente ciudad maya se mantuvo oculta, gracias a su frondoso entorno, una densa selva que la protege.

Esta visita es uno de los sitios obligatorios por conocer en el viaje por Guatemala ya que la grandeza de la obra maya genera un gran impacto. La impresionante Gran Plaza que se encuentra custodiada por altas pirámides y por grandes edificios, como el Templo del Jaguar, seguramente cautivarán a cualquier turista. 

Y la naturaleza que se encuentra a su alrededor acuna a varios animales muy especiales, como los monos aulladores y una gran variedad de aves, entre las que se pueden contar al quetzal y a los tucanes.

Otras ruinas arqueológicas cercanas a Tikal es Yaxhá, el segundo yacimiento maya más importante, cuya ventaja es que al no ser tan conocidas se pueden recorrer casi en soledad y así disfrutar aún más del paseo.

Antigua

La antigua capital de Guatemala es considerada por muchos como una de las ciudades más lindas de Centroamérica, y ha sido declarada también como Patrimonio de la Humanidad.

Se ubica entre tres grandes volcanes, proporcionando un enclave único para contemplar y admirar. Las mejores vistas de los volcanes de Fuego, de Agua y Acatenango se pueden disfrutar desde el Cerro de la Cruz, al que se puede llegar caminando desde la ciudad.

Una postal típica de este sitio es la foto en el Arco de Santa Catalina, el símbolo de la ciudad, con uno de los volcanes detrás. Pero merece la pena tomarse el tiempo para recorrer sus calles de piedra con sus casas coloniales coloridas, y sus iglesias y conventos históricos, como la Iglesia de Nuestra Señora de la Merced y el Convento de las Capuchinas. También se debe incluir en el recorrido el Palacio de los Capitanes Generales, la Catedral de Santiago, y probar el café de Guatemala, que figura entre los mejores del mundo, en alguna de las cafeterías gourmet del lugar.

Lago Atitlán 

Este lago se sitúa a más de 1.500 mts. de altitud y se encuentra rodeado por tres asombrosos volcanes, el Atitlán, el Tolimán y el San Pedro, que conforman una vista panorámica muy especial.

Es un lugar perfecto para dejar satisfecho a cualquier turista ya que cuenta con varias actividades posibles, como senderismo ascendiendo al Volcán San Pedro o a la Nariz del Indio, kayak en el lago, o empaparse de la cultura maya conociendo a los pueblos que se ubican a la orilla del lago que aún conservan sus tradiciones, como San Juan la Laguna y Santiago Atitlán.

Además, es un sitio que solo contemplarlo invita a relajar y descansar, por lo que posee varios centros de meditación donde se realizan retiros y prácticas de yoga.

Semuc Champey

Este parque natural es una de las maravillas que nos regala la naturaleza, el que debe figurar en el listado de imprescindibles sin excepción. Su lugar emblema son las piletas naturales de color verde turquesa en la montaña, rodeadas por un paisaje idílico.

En Semuc Champey hay un mirador increíble al que se recomienda ir para tener una vista privilegiada de los pozos naturales y de la vegetación, para luego bajar y seguir por los distintos senderos para darse un gratificante baño en sus aguas. 

Mercado de Chichicastenango

Este mercado es el más grande y pintoresco de Guatemala, y se sitúa en la totalidad de la plaza principal, frente a la Iglesia de Santo Tomás que también se debe visitar.

Si bien hay movimiento los siete días de la semana, los días jueves y domingo son los días de mayor ajetreo en esta localidad, donde se podrá apreciar el intercambio entre locales, además de entretenerse con los puestos exclusivos para turistas. Productos de toda índole, desde artesanías autóctonas, recuerdos de viaje, telas de gran colorido y comida de todo tipo, son algunos de los elementos que se pueden encontrar en este sitio.

Río Dulce y Livingston 

Estas dos localidades son las más destacadas del Caribe en Guatemala, siendo el puerto de Río Dulce el lugar de acceso para visitar Livingston. En las distintas lanchas se accede a esta pequeña población de pescadores, siendo el recorrido hasta llegar a ella un verdadero deleite a la vista gracias a sus paisajes increíbles. 

Livingston es un sitio que poco se relaciona con el resto de los lugares que se pueden visitar en Guatemala, ya que es allí donde viven los garífunas, los descendientes de los esclavos africanos que se mezclaron con uno de los grupos indígenas del país, por lo que visitar Livingston es ideal para sumergirse en su cultura, en sus costumbres y en su ritmo de vida tranquilo.

Sus casas son coloridas, siendo varias de ellas intervenidas con murales, por lo que lo más aconsejable es caminar sin rumbo, e ir descubriendo el arte urbano plasmado en distintas fachadas.

Río Dulce no es solo el sitio para subir a la lancha que lleva a Livingston, sino que en ella existen otros atractivos como poseer un extenso ecosistema acuático, además de tener la posibilidad de encontrarse con manatíes, cocodrilos y una gran variedad de aves. Y el recorrido se debe terminar con el paseo en lancha hasta el Castillo de San Felipe de Lara, una fortaleza española construida en el siglo XVI.