Málaga revelada, más allá de sus playas

Málaga es una ciudad que ha ido mutando con el correr de los años y actualmente se jacta de ser uno de los destinos más completos de España, al tener una oferta de ocio con sus fantásticas playas, siendo la Playa de la Malagueta la más célebre, sumando, además, una cantidad de monumentos históricos y un abanico de construcciones de gran valor que la convierten en un lugar de deseo para el turismo.

Más en detalle mencionaremos las distintas posibilidades de entretenimiento en Málaga, ya sea cultural, histórica o de aventura. De todas maneras, es importante puntualizar también dos lugares más que deberían figurar en el listado de impostergables como lo son el muelle y la calle Larios.

El muelle es una de las zonas con mayor vida agitada, siendo que la remodelación que atravesó hace algunos años la ubicó como uno de los sitios más divertidos para pasear disfrutando en el recorrido, además, de las vistas frente al mar. El caso de la calle Larios es similar en cuanto a movimiento, pero se trata de la calle peatonal más conocida de Málaga, donde se centra gran parte de la actividad comercial.

Turismo cultural

A diferencia de otros lugares que se ubican de cara al mar, Málaga ofrece mucho más que sus playas, ya que en los últimos años ha ido sumando valor a su patrimonio cultural al ir abriendo varios museos, por lo que atrae también al turismo educativo. A continuación, mencionaremos algunos de sus principales atractivos relacionados a este rubro para que se sumen al listado de imprescindibles por visitar durante el viaje.

Uno de ellos es el Museo de Málaga, que fue uno de los últimos en inaugurar y es uno de los más completos de España, al reunir la colección tanto del Museo de Bellas Artes como del Museo Arqueológico de Málaga. Otra parada obligatoria es la del Museo Pablo Picasso, situado en el Palacio de Buenavista, para empaparse sobre la vida de este gran artista y ver de cerca casi 300 de sus obras.

Por otra parte, el Centro Pompidou, con su particular fachada en forma de cubo de colores, es uno de los grandes referentes en cuanto al arte contemporáneo, no solo para disfrutar de su curioso exterior, sino para maravillarse por las obras del siglo XX y XXI que alberga en el interior. El último de los museos que merecen una visita es el Museo Carmen Thyssen, ubicado en el Palacio de Villalón, con una colección impresionante de pintura española de los siglos XIX y XX.   

Arquitectura destacable

Además de sus museos, Málaga es dueña de una gran riqueza arquitectónica, con piezas que llamarán la atención y despertarán el interés de cualquier turista. Prueba de ello es el Castillo de Gibralfaro, construido en el siglo XIV, ubicado en la cima de una colina. Por la ubicación de esta fortaleza las vistas panorámicas que ofrece son únicas, pero su interior es igual de cautivador con la Torre del homenaje, el Centro de Interpretación, las murallas o la Torre Mayor. 

Otros sitios muy recomendables son la Alcazaba y el Teatro Romano de Málaga que se encuentran, al igual que el Castillo de Gibralfaro, en muy buen estado de conservación. La Alcazaba es una fortaleza que se levantó en el siglo XI mientras Málaga se encontraba bajo dominio musulmán, siendo el Patio de los Surtidores uno de sus mayores exponentes. El Teatro Romano es una joya arquitectónica construida en el siglo I d.c., el que hoy en día se puede visitar gracias a haber sido descubierto en el año 1951.

El Mercado Central de Atarazanas es el sitio ideal para descubrir las delicias gastronómicas del lugar, mientras uno se deleita con su asombrosa fachada en hierro forjado sobre un antiguo astillero medieval del siglo XIV. Una verdadera obra de arte que debe conocerse, al igual que la Catedral de la Encarnación, la última de las recomendaciones arquitectónicas y uno de los símbolos de Málaga. Su belleza exterior de estilo renacentista y barroca solo es el preámbulo de lo que se encontrará en su interior con su exuberante ornamentación. 

El Caminito del Rey

Una de las excursiones más populares y recomendadas para realizar en Málaga es la del Caminito del Rey, una senda de 3 kms. de largo y tan solo un metro de ancho, el cual destaca por encontrarse literalmente colgando de las paredes del Desfiladero de los Gaitanes, una formación que se produjo por la erosión ejercida por el río Guadalhorce en la sierra, provocando gargantas y cañones de gran profundidad. 

Es una de las actividades más increíbles y la que, sin lugar a dudas, quedará en tu retina, al poder estar en contacto con una naturaleza asombrosa. Es perfecta para los amantes de la aventura ya que hay trayectos del sendero que se vuelven emocionantes, e incluso, con escaladas, aunque puede ser una experiencia no conveniente para quienes sufren con las alturas.

No cabe dudas de que si se dispone de más tiempo es un sitio para visitar así se complementan las atracciones arquitectónicas nombradas en los puntos anteriores con un espectáculo natural de gran encanto.