Este pequeño país situado en la península balcánica es dueño de un gran número de castillos ejemplares y pueblos costeros con mucha historia.
Pero como si esto fuera poco, a la historia de Albania se le suma que cuenta con parajes naturales asombrosos, con playas idílicas y parques nacionales para explorar los Alpes albaneses como el Parque Nacional de Butrinto, el del Valle Valbona y el de Llogara, todos ellos con una gran riqueza natural para deleitar la vista.
Tirana
La capital del país no podía faltar entre los impostergables por conocer ya que ofrece una gran cantidad de experiencias turísticas para cubrir todas las expectativas de quien la visita. Es una ciudad muy animada, con paseos culturales en museos y galerías de arte y visitas a lugares que permiten conocer más en profundidad la dura historia de este país.
Prueba de ello es el paseo al Bunkart, un espectacular bunker antinuclear situado en las afueras de la ciudad. Esta impresionante obra se construyó en la década del 70 por orden del ex dictador Hoxha y actualmente funciona como un museo para acercar al turismo la historia comunista de Albania.
Otros sitios obligados para sumar en el recorrido son la mezquita Xhamia e Namazgjase, y deleitarse con la variada oferta gastronómica en bares y restaurantes del pintoresco barrio Blloku.
Riviera Albanesa
Es, sin lugar a dudas, lo más frecuentado en el país, y no es para menos, ya que sus más de 40 kms. de costa bordeando el mar Jónico brindan el lugar ideal para poder relajarse y pasar un momento agradable disfrutando de la belleza del lugar.
Sus aguas cristalinas de color turquesa y playas de arena blanca y piedras se combinan con pueblos costeros de gran encanto. Perderse por sus calles empedradas y conocer sus rincones e iglesias ortodoxas resulta un lindo paseo luego de haber descansado en su litoral.
Uno de los destinos imperdibles es la ciudad costera de Dhermi, con un casco antiguo y playa dignos de ser visitados. Pero también se deben sumar en el listado la ciudad de Himara y la de Vuno y la playa de Gjipe y la de Drymades.
Gjirokaster
Declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, esta ciudad impactará por su centro histórico muy bien conservado, y por su arquitectura otomana tan particular. Observar los edificios otomanos típicos de la región, denominados kules; recorrer el bazar; o conocer algunas residencias fortificadas como la Zekate House, son algunas opciones más de turismo para que el paseo sea muy especial.
Además, es dueño de uno de los castillos mejor mantenidos de toda Albania que, por encontrarse en la cima de una colina custodiando a la ciudad regala unas vistas maravillosas del entorno. Lleva el nombre de la ciudad y hoy en día es sede de un museo en el que se exhibe la historia militar de la zona.
Berat
Berat es otro de los lugares que han sido declarados Patrimonio de la Humanidad, con un casco antiguo y un castillo que le han valido dicho título. Recibe el apodo de “la ciudad de las mil ventanas” por el gran número de ventanas que presentan las fachadas de sus edificios.
Ubicada entre montañas, es una de las ciudades más antiguas de Albania, con más de 2.000 años de historia en sus calles, por lo que ha sido atravesada por varias civilizaciones. Las fachadas de las clásicas viviendas cuentan con una influencia otomana bien marcada que las caracteriza.
El castillo, al igual que en Gjirokaster, se alza sobre una de las altas montañas por lo que la perspectiva panorámica del pueblo desde allí es fantástica.
Kruje
Para estas alturas ya te habrás dado cuenta la importancia de los castillos en el turismo albanes, y el de Kruje no es la excepción.
En ese castillo se produjo la mayor resistencia en la lucha contra los otomanos, en manos de uno de los líderes más importantes del país, George Kastrioti Skanderbeg, por lo que guarda un gran peso histórico del país. Otro castillo que se puede mencionar es el de Rozafa, que si se dispone de algo más de tiempo dentro del país es una gran opción para conocer.
Además del castillo se recomienda realizar una visita por el antiguo bazar donde se encuentra el mercado, con infinidad de tiendas ofreciendo tanto productos tradicionales de la zona como recuerdos para llevar. Una oportunidad para entretenerse y pasar un agradable momento.
Blue Eye
Uno de los majestuosos fenómenos naturales que posee Albania es este manantial de agua que forma una pileta de más de 50 mts. de profundidad. Se desconoce cuan profundo es ya que aún no se ha podido llegar al fondo de esta piscina natural.
Y si bien no está permitido meterse en sus aguas, debe ser reconocido como uno de los puntos de interés de este país, por el color de sus aguas, y por encontrarse en un entorno que te quitará el aliento por la grandeza de la naturaleza.
Es uno de los destinos más requeridos por los turistas por lo que se aconseja llegar bien temprano al lugar para poder disfrutarlo en soledad.